INICIO AUTORES BIBLIOTECA CULTURA GEOGRAFÍA HISTORIA WEBOTECA
SECCIONES
01 Autores
Lista alfabética
Lista cronológica
02 Biblioteca
Libros por autor
Bibliografía de referencia
03 Cultura
Artes
Ciencias
Humanidades
04 Geografía
México
Hispanoamérica
Mundo

Mapoteca
05 Historia
Grecia clásica
Roma clásica
Mesoamérica
Edad media
Renacimiento
Edad moderna
Hispanoamérica

Eje del tiempo
06 Humanistas mexicanos
Las generaciones literarias
07 Weboteca
Audioteca
Bibliotecas en línea
Videoteca
Vínculos por autor
Vínculos por temas
08 ¿Quiénes somos?
Estudiantes
Investigadores
09 Publicaciones
Libros
Revistas
10 Seminarios
Antropología
Filosofía
Historia
Letras
Educación superior
11 Ecosofía
Ecología y humanismo
12 Facultad de Filosofía y Letras. UNAM
Aconsectetur adipisici elit
13 CIDHEM
14

Cátedra Alfonso Reyes
Humanista mexicano

HUMANISTAS MEXICANOS

 

HUMANISTAS MEXICANOS



JOAQUÍN D. CASASÚS
Miembro de la Academia Mexicana de la Lengua
Generación 1855

Nació en Frontera, Tab., el 23 de diciembre de 1858; falleció en Nueva York, el 25 de febrero de 1916.
Ingresó en la Academia en 1904 como numerario; silla que ocupó: XVIII (1º). Cargos: Tesorero (2º ): 1908-1912; Director (7º): 1912-1916.



Fue economista, abogado, poeta, y uno de los intelectuales más destacados durante el gobierno del general Díaz. Nació en Frontera, Tabasco, el 22 de diciembre de 1858 y murió en Nueva York el 25 de febrero de 1916.  Formó parte de varias comisiones técnicas para redactar leyes tan importantes como la de Instituciones de Crédito y la que reformó, en 1905, el sistema monetario mexicano. Tuvo a su cargo el asunto de límites entre México y los Estados Unidos, conocido con el nombre de "El Chamizal", negocio de gran importancia y en el cual alcanzó señalado triunfo.
   Fue miembro de varias sociedades científicas nacionales y extranjeras; director de la Escuela Superior de Comercio y Administración y de la de Jurisprudencia; profesor de economía política en la misma Escuela de Jurisprudencia y en la Nacional de Ingenieros; embajador de México en los Estados Unidos. Fue Casasús, durante dos décadas, una personalidad prominente y de indudable influencia en la vida económica y cultural del país.
   Entre sus obras cabe citar las siguientes:
   La cuestión de los bancos a la luz de la economía política y del derecho constitucional, Historia de la deuda contraída en Londres, Las instituciones de crédito en México, Los problemas monetarios y la Conferencia Monetaria Internacional de Bruselas, publicada en París en lengua francesa, La depreciación de la plata y sus remedios, La reforma monetaria en México, Las reformas a la Ley de Instituciones de Crédito y El Chamizal. Hay que mencionar sus traducciones del latín y del inglés a nuestra lengua y la obra poética personal: Musa antigua, Versos, Cien sonetos, En honor de los muertos y Cartas Literarias.
La obra económica de Joaquín D. Casasús, trata en la mayoría de los casos de cuestiones de moneda y crédito. Seguramente que si se redactara una historia de las doctrinas sobre el crédito y la moneda en América Latina, este autor ocuparía lugar señalado. Pocos escribieron en su tiempo tan bien como él sobre problemas monetarios y bancarios. Para nuestro economista el desarrollo de los diversos factores que constituyen la riqueza se comprueba con el aumento de la producción, la cual, a su vez, se mide por la exportación de mercancías excedentes después de satisfacer todas las necesidades interiores. Casasús conocía bien la teoría económica, se hallaba perfectamente informado, pero le ocurría lo mismo que a muchos buenos economistas de amplia cultura europea que han nacido en países de evolución económica retardada; no había examinado a fondo las condiciones peculiares de su propio país. Lo que Casasús dice respecto a que se exportan los excedentes de la producción, después de satisfacer las necesidades del consumo doméstico, es verdad tratándose de naciones capitalistas, de un capitalismo maduro y bien organizado; mas no siempre lo es en aquellos territorios que se desenvuelven bajo la presión de grandes empresas extranjeras, que muchas veces exportan mercancías que no constituyen el excedente del consumo interno, porque actúan de conformidad con su propio interés y no con el del país en que operan. En México hubo algunos ejemplos. Y es que la teoría económica ha sido elaborada en las naciones capitalistas, razón por la cual no siempre sus principios se comprueban en países de economía colonial o semicolonial, sujetos a la influencia de grandes potencias. Los economistas de naciones subdesarrolladas no deben cometer el error de aplicar en su propio país, sin previo y cuidadoso estudio, las teorías elaboradas por los economistas de Nueva York, Londres o París. No hacerlo así, es decir, no analizar con profundidad las teorías importadas sin cavar con hondura en la realidad doméstica puede ocasionar males irreparables. Es partidario de que se realice una reforma arancelaria, bajando los impuestos hasta hacer imposible el contrabando. No es partidario del libre cambio sino de un proteccionismo moderado. Piensa que el arancel debe permitir el establecimiento de nuevas industrias y el desarrollo de las existentes para estimular la inversión del capital extranjero, que pensaba vendría a México en torrente benéfico y fecundo. Al tratar de la moneda dice que debe llenar cuatro funciones principales: servir como medio de cambio, ser una medida común del valor, regular todos los demás valores y al mismo tiempo ser el elemento para conservarlos.
Jesús Silva Herzog
Semblanzas de Académicos. Ediciones del Centenario de la Academia Mexicana. México, 1975, 313 pp.

----------------------------------------------------------------------------

Agradecemos el apoyo para la realización de este proyecto de:


FACULTAD DE FILOSOFÍA Y LETRAS. UNAM

 


GOBIERNO DEL ESTADO LIBRE Y SOBERANO DE MORELOS





UNIVERSIDAD VIRTUAL ALFONSINA


 

 

 

© Copyright. Algunos derechos reservados por Matemágica-Universidad Virtual Alfonsina 2007-2008